41.- Mal de muchos consuelo de tontos

  "Mal de muchos, consuelo de tontos"

-¿A dónde vas Vicente?, Donde va la gente?-

Vivimos en un Mundo mediatizado por los medios de masa y que van dirigidos a cubrir el ocio de la Población. Unos medios que, por otro lado, dirigen sus objetivos, no a aumentar el bagaje cultural y de conocimiento de sus destinatarios, sino a vulgarizar, en todos los sentidos, la Condición Humana; es decir, hacer desaparecer los valores que se le presupone a una Civilización, tales que la Honestidad, la Sinceridad, la Honradez, la Nobleza, la Lealtad, la Moderación, la Discreción, la Empatía, la Solidaridad y la Confianza.

Hoy en día, todas esas virtudes propias de una Persona de Bien, han sido enterradas bajo el estercolero de los culebrones norteamericanos de los años ochenta y noventa, como Dallas, Dinastía, Los Colby, Falcon Crest y de la Telebasura Nacional que comenzara con de Tú a Tú, Tómbola y  continuara con, la Sonrisa del Pelícano y Crónicas Marcianas hasta llegar al bochornoso Sálvame de luxe. A lo que deberemos de añadir los grotescos reality shows como Gran Hermano o la Isla de los Famosos. 

Con ésta persistente propaganda de amoralidad, mediante sus héroes de lo grotesco y del Mal Gusto, se ha conseguido que las nuevas generaciones hayan perdido el recato y el buen gusto, a la hora de mostrar sus trapos sucios de forma pública y sonriendo como si se tratara de algo normal y no censurable, buscando ese minuto de Fama televisiva. Ante esta situación de manipulación psicológica que predica el egoísmo y la insolidaridad, las personas que fuimos educados, en condiciones anteriores, al menos diferentes,  nada tenemos que hacer, pues nuestro condicionamiento social es completamente opuesto al que se persigue, hoy en día, con la Agenda 20/30, la Ideología de Género y el Culto a Tánatos, que no deja de ser el objetivo final de toda ésta manipulación mediática, pulverizar los valores morales establecidos, a la que estamos siendo sometidos y de lo que, la mayoría de la Población, en absoluto es consciente.

Así nos han inculcado a la pasividad extrema y haciendo que confiemos, artificialmente, en terceros como políticos, medios de comunicación y funcionarios, con el fin de, supuestamente, que no tengamos que rompernos la cabeza en pensar. 

Así, por simple inercia psicológica, tenemos fé absoluta en esas fuerzas del Estado para que nos solucionen, cómodamente para nosotros, los problemas sociales; pero eso no termina de suceder, sino que se nos convierte en una suerte de marionetas obedientes e indolentes que tragan con todo, mientras que las fuerzas de manipulación, especialmente su jerarquía, llena sus bolsillos con su Traición al Pueblo y permite que una Élite de alto poder económico haga su agosto a costa de la esclavitud encubierta de una gran mayoría de la Población.

A quienes denunciamos, públicamente, estas cosas se nos denomina como agentes de la Teoría de la Conspiración o conspiranoicos. Desde luego, hay mucha gente de buena voluntad que aún cree que ni el Poder ni los medios les están engañando y que quienes alzamos la voz para que la gente despierte, estamos chalados y viviendo en algún mundo de fantasía irreal; pero podemos demostrar que es justo lo contrario.

En estos momentos apocalípticos, donde mediante frecuencias de microondas e inoculaciones genéticas, que se hacen pasar por otra cosa bien distinta, se está diezmando a la población, a la par que mueren seres humanos en estúpidas guerras sin algún sentido para la mayoría de la Población Mundial, aquellos que venimos predicando sobre la mentira y el mal; no solo es que se nos señale, sino que se nos margina y hasta la familia y amigos no quieren saber nada de nosotros mientras nuestros amigos y familiares, los que nos han dejado de lado y nos miran con odio acusándones, supuestamente, de irresponsables e insolidarios, van enfermando e inexorablemente muriendo debido a los experimentos génicos establecidos a la fuerza y, casi, con carácter obligatorio.

Lo suyo sería que, esos familiares y amigos, viendo lo que está sucediendo en el Mundo, abriesen los ojos, se acercarán a nosotros y nos dijeran, lo siento amigo, Hermano mío, cuan equivocado me encontraba; pero esto no sucede sino que se ha creado una suerte de rencor hacia nosotros, como en el chiste ese de "Me joden los profetas". Lo cierto es que jamás fuimos de profeta sino que, por nuestra formación específica, veíamos lo que se nos venía encima. 

Esos familiares y amigos que no desean saber nada de nosotros porque les avisamos, encarecidamente de lo que estaba sucediendo, desearían que nosotros enfermáramos y muriésemos solidariamente con ellos. Están pidiendo a gritos, a los poderes del Estado, que ése Experimento Génico, como dijimos generalizado, lo conviertan en obligatorio para que así, los que desconfiamos, desde un principio, de que el Estado y los Medios estuviesen a favor del conjunto de la Población, suframos la misma suerte que por ingenuos, confiados e imprudentes están padeciendo ellos mismos.

Suponemos que si consiguen hacer realidad su deseo, experimentaran con nosotros a la fuerza o, de lo contrario, nos confinarán en centros especiales para obligarnos a que, voluntariamente, demos el paso para, solidariamente, con los ya afectados o pasados a mejor vida convirtirmos en los siguientes conejillos de indias de un diabólico experimento eugenésico.

Desde luego, por supuesto que sí, denunciamos a los poderes eclesiásticos de todo tipo, a los grandes maestros de asociaciones filantrópicas y fraternales, así como a las direcciones sin ánimo de lucro y deportivas que, mediante diversos métodos, han forzado a sus feligreses y acólitos a formar parte de una pesadilla tanato-eugenésica.

No, nosotros sin forzar u obligar a nadie, no vamos a ser cómplices del Flautista de Hamelín para que la gente se sacrifique, con la falsa excusa de "Por el Bien del Planeta"; pero, en realidad, en beneficio de unos pocos individuos, que buscan vivir para siempre en éste Planeta, y que son los que dominan las grandes corporaciones financieras denominadas como Grupos de Inversión. Para que perviva una generación inmortales hay que hacer hueco en el Planeta mediante el sacrificio eugenésico de un sector de la Población que se considera sobrante e innecesario por débil e  improductivo.

Espero que se haya entendido con claridad, dado que es lo más claro que se nos permite hablar. 

Aralba R+C