“El mensaje a la Iglesia de la Ciudad de Laodicea”
-La Ciudad de los Derechos Humanos-
A.M.L. “Rosa Mística” de la F.R.A. en España
¡Paz, Tolerancia, Verdad!
“Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios (Cristo), dice esto:
Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente (un pasota en toda regla). ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad (todo les da lo mismo); y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo (ignorante absoluto). Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego (trabajo y esfuerzo), para que seas rico, y vestiduras blancas (las buenas obras de la Fe) para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez (ignorancia); y unge tus ojos con colirio, para que veas (la Verdad). Yo reprendo y castigo (corrijo) a todos los que amo; sé, pues, celoso (laborioso), y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.”
(Apocalipsis 3:14-22)
Tras haber pasado por mensajes dirigidos a cinco iglesias imperfectas; pero funcionales y otra, la de Filadelfia, rozando la perfección, llegamos al contrapunto de todas ellas con el Mensaje a la Iglesia de “Laodicea”; en tanto que ésta funciona al contrario de cómo le gustaría al Señor Cristo Jesús, el Ungido Salvador, nuestro Dios. Los miembros de esta Iglesia parece que pasen de todo y no están contentos y alegres exaltando la Gracia del Señor ni se encuentran tristes y deprimidos porque su Congregación se encuentra falta de Fe. Pareciera que están ahí porque es lo propio, lo marcan las costumbres y, simplemente, es cómodo y sin complicaciones; sus miembros se encuentran en un somnoliento Estado de confort.
Esa tibieza es algo detestable; en tanto que se trata de una pérdida del precioso tiempo que se nos ha concedido para vivir en el Mundo y adquirir experiencias. Quienes se portan bien, construyen su traje de bodas mediante la Fe de la Gnosis. Quienes se portan mal y terminan arrepintiéndose adquieren un gran cúmulo de importantes experiencias para ser usadas cuando sean llamados, por la Fe, a hacer el Bien; pero los tibios, esos no tienen remedio. Pareciera que hubiesen sido escupidos por el Creador en una balsa de agua y permanecen flotando a la deriva como si lo que les rodea, su propia vida, no tuviese que ver con ellos.
Los miembros de la Iglesia de Laodicea son aquellos que ni siquiera se preguntan por el sentido de sus vidas. Ellos piensan que con su actitud, falsamente Taoísta, del “No hacer” ya se encuentran haciendo lo correcto. Ciertamente no delinquen; pero tampoco se preocupan por el bienestar de aquellos que no sean ellos mismos y hay que recordar que el “Pecado” no es solo cometer malas acciones sino también omitir los buenos hechos cuando se nos presenta la oportunidad. No ayudar a alguien cuando nos necesita porque así no nos implicamos en el Karma de nadie, no hacer, propiamente dicho, es algo que provoca vómito en Cristo, nuestro Señor.
Los tibios son, por decir así, las personas más profundamente dormidas a la Verdad, no solo de lo que son ellos, sino también de lo que han venido a hacer aquí; pero eso no es lo malo, sino que, aunque lo supieran les daría exactamente lo mismo.
Lo siguiente, no nos hartamos de repetirlo hasta llegar a ser cansinos: Nuestro Mundo no es un Parque de Atracciones al que hemos venido para divertirnos, ser felices y pasarlo bien. Nuestro Mundo es un gran Campo de experiencias que funciona como un Sanatorio para dioses caídos. Eso es lo que, en verdad, somos y lo que en Verdad es. Un Sanatorio, no solo para restaurarnos hasta nuestra Condición original, en lo físico y psíquico sino también en la parte espiritual que le compete al Alma. Éste Mundo es un Campo de duro trabajo y de lucha cruel, donde todos debemos de intentar dar lo mejor de nosotros.
Por lo tanto, mis queridos amigos, más que un Campo Virtual de “Gamers”, tipo Matrix, nuestro Mundo es un Campo de Batalla y donde nosotros somos los guerreros que luchamos, contra nosotros mismos y nuestras bajas pasiones, con el fin de restaurar al Creador, en nosotros, y cuyo aliento de vida concedió a su Creación en su simbólico sexto día.
No has venido aquí para permanecer dormido plácidamente mientras los demás realizan el trabajo que tú no haces. Debes despertar al hecho de que has venido aquí a luchar contra el natural sufrimiento de éste Mundo y a conseguir tu desconocido objetivo con tesón, esfuerzo y disciplina, evitando caer en estados depresivos que solo conducen a la indolencia y el dejarse llevar por las corrientes de los arcontes.
Si solo no puedes, no desesperes, abandona la Iglesia de Laodicea y ubícate en otra donde sus miembros están llamados a Sanar a la Humanidad “¿Te suenan los rosacruces?”
En Luz, Verdad, Amor
¡Que las rosas florezcan sobre vuestra Cruz!
Frater Aralba R+C; S.C. de la F.R.A. de España; Linaje: Huiracocha, Aureolus, Camael, Amorifer
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