"Tiempos difíciles"
-Crónica del Apocalipsis"
Vivimos la Realidad de un Mundo donde el bien y el mal se diluyen, confundiéndose el uno con el otro, gracias al bien hacer de los medios propagandísticos. Nunca ha existido mayor confusión que ahora, de conocer si nos encontramos en el Bando equivocado; es decir, en el de los buenos o los malos.
Los políticos, no solo enarbolan su pendón, con total descaro, de corrupción e ineptitud, sino que se han convertido en meros funcionarios; pero no del Pueblo que les ha votado, sino del Grupo de Inversión, mediante los créditos bancarios a fondo perdido, que ha puesto el dinero para financiar sus campañas electorales. Esto se veía venir, pues ya conocéis el dicho "El que paga manda"
El mal denominado "Quinto Poder", el Periodismo, reconvertido en Medio Propagandístico de los Grupos de Inversión, debido a la Crisis de la Prensa producida por el desarrollo y proliferación de los medios gratuitos y de Internet, manipula constantemente la información que nos llega, haciendo más difícil el poder conocer dónde termina la desprestigiada verdad y donde comienza la descarada mentira.
Nuestro Mundo viaja sobre las vías de un tren con ruedas de caucho; es decir, con una inestabilidad que no solo no ofrece seguridad sino que el Desastre más absoluto pareciera su verdadero objetivo. La gente, seguimos creyendo que vivimos en la democracia de unos países libres y privilegiados; pero en realidad se trata de una pantomima cuyo trasfondo está presidido por una esclavitud de nuevo cuño y donde, además, por unas míseras monedas se conmina al esclavo a que se busque la vida como pueda.
En absoluto hacemos apología por la esclavitud del pasado y donde el bienestar del esclavo dependía, básicamente de la suerte. Suerte de haber dado con buenos o malos amos. Ahora es incluso peor, pues al esclavo se lo ha liberado de los cuidados y obligaciones, para con él, del Amo; pero no de su Trabajo y a cambio recibe un paupérrimo salario que no le llega para vivir y con el que, él mismo, tiene que organizar su miserable vida.
"Tiempos difíciles para la Lírica", donde el "Parece" ha suplantado al "Es"; es decir, parece que vivimos en una Democracia; pero no es una verdadera Democracia porque está controlada, más que tutelada, por organismos supranacionales no democráticos, dominados por el Capital Privado de los grupos de inversión, en los Paraísos Fiscales, anglosajones, y donde la Élite tiene depositado, a buen recaudo, su dinero. Parece que tuviéramos libertad; pero solo se trata de una ilusión pasajera que pronto se desvanece cuando nosotros mismos debemos auto censurarnos con el fin de no ser señalados y censurados y amenazados, externamente, como desinformantes, por otros.
Europa, el denominado como Viejo Continente, ha quedado claro que es una suerte de vasayo occidental del Nuevo Mundo Anglosajón y Sionista que pretende un Nuevo Orden Mundial, disfrazado de bondades para los pobres y menesterosos; pero cargado de frialdad y de muerte para esos mismos que pareciera defender; es decir, todo parece; pero, en realidad, nada es lo que parece, y eso en mi Pueblo y en el vuestro se llama "Engaño"
Vivimos en una construcción cuyos ladrillos son todos mentiras; un mundo de engaños sobre engaños diseñado para confundir incluso a aquello que poseen una buena Formación Académica. Antes se decía que había que aprender y estudiar en la escuela para que de mayores no nos engañaran y pudiéramos ser alguien en la Vida. Ahora los engaños son tan sutiles y trenzados con manipulación psicológica que es muy difícil el conocer si estamos siendo o no engañados o la propia magnitud del Engaño.
Tanto Políticos como Medios se defienden contraatacando, acusando de conspiranoicos y divulgadores de mentiras, a aquellos que, despiertos, han ido analizando la Verdad de nuestro Tiempo y que en realidad es la misma realidad de siempre; pero amplificada por los medios tecnológicos sctuales; porque no os vayáis a creer que localizar la Verdad es sencillo y se encuentra aquí o en otro Lugar. No, porque Internet también nos miente mostrándonos la marca blanca de los medios oficiales. Mientras unos te muestran el engaño pintado de blanco otros te lo muestran de negro. Así, siempre te queda la opción de votar a A o a B, aunque ambos estén programados para mantenerte sumido en el engaño.
Por lo tanto, la verdad no se encuentra en los unos o en los otros y, somos nosotros mismos, desde nuestra propia capacidad de discriminación interna, los que debemos de reconstruir la Verdad partiendo de nuestra propia Realidad. Cosa no tan sencilla como simplemente decirlo.
La cosa no es tan simple como señalar aquí o allá y decir, éste y aquel otro nos miente, pues la Ley está construida para que su peso caiga sobre tí en cuanto invadas la intimidad personal de sus nombres; es decir, ya no es cuestión de ser señalado sino de ser llevado a juicio y encarcelado, si no eliminado; es por ello que, en estos tiempos apocalípticos, no nos queda otra que hablar para que se nos entienda; pero de forma velada, sutíl y no abierta del todo, como sería lo esperable en verdaderos países libres y democráticos.
Ser tú mismo, es la solución que te ofrezco; que no te dejes llevar por la supuesta verdad del último que llegue. Que coloques las cosas en su lugar y las juzgues, interiormente, con propiedad y equilibrio. Utiliza tu buen criterio y observa con detenimiento para luego proceder como mejor te convenga a tí y a los que se encuentren bajo tu protección. No te dejes llevar por los cantos de las izquierdas o de las derechas; pero tampoco por esos otros que los combaten diciendo que no, que son ellos, los nuevos, los legítimos poseedores de la verdad que te pueden salvar. Pero recuerda que los que se suman al juego también están bajo sueldo de los mismos jefes.
No te dejes engañar por nadie y discrimina todo lo que te rodea. Tómate un tiempo para reflexionar y no actúes, jamás, de forma impulsiva dejándote llevar por las emociones más básicas y viscerales.
Ni tú ni yo poseemos los medios necesarios para combatir la maldad de los últimos tiempos; pero sí poseemos la potestad de enarbolar la bandera de la Verdad, nuestra Verdad, y convertirnos en ejemplo para los demás.
No es cuestión de señalar aquí o allá y decir, ésta Organización o nuestros gobernantes o esos medios de comunicación y entretenimiento nos mienten; en tanto que la mentira es como una niebla que nos invade y rodea desde todas partes. ¿Cómo te van la televisión y los periódicos a engañar?, ¿Cómo quienes están encargados de tu seguridad y salud podrían engañarte?. Pues lamento decirte que todos te están engañando a cada instante, pues están teledirigidos por los grupos de inversión anglosajones-sionistas, y tú y yo, para ellos, no dejamos de ser otra cosa que peones prescindibles en un planetario tablero de ajedrez en donde la Bolsa es la Reina y Señora. Tu vida posee el valor de un Penique.
Ponte en guardia y, al menos, por favor, sé consciente de que te están engañando y no te conviertas en estúpido cómplice de sus engaños. Mantén tu integridad y honestidad intactas y observa el escenario del Final de los Tiempos como un espectador bien despierto. Demuéstrate a tí mismo que eres bueno pero no tonto y de que, a pesar de que no puedas impedir que te engañen, al menos sí conocer que te están engañando, y ello con el fin de evitar males mayores y que el tsunami de la mentira no te arrastre hacia lo desconocido. Sé consciente y pon tu ojo avizor.
Aralba R+C
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